miércoles, 28 de noviembre de 2012

Los Egos

Down. Querido suceso. Y al cielo.
Cuando el niño era niño.

Y trasgredirte la norma se aparece diáfano a un sistema lógico.
Emitiendo falsedades al falo y la sangre mordisqueada de la barricada.

Y cuantas rocosidades suponen sublevarte al inconsciente.
Suponiendo una virgen que elevaría amores, acorde de los elementos persuasivos.
Desatando los rencores que se esconden en mí performance, soberana.

La lluvia cuando tuve que jurar mortal. 
La tristeza. Tú ida.
Los tristes. La reflexión de las nociones a lo imperfecto. 
El quid del leit motiv.
Y cuando aprenda, nos volaremos de algún planeta.

martes, 27 de noviembre de 2012

Los antitéticos

Un texto duro, real, homicida. Un texto de la mundanidad sinverguenza.
Un texto proclive para generar discusiones vitales, sí la intencionalidad es cosa manifiesta. O no. Pero nunca supone que quería omitirlo.

Y las pulsiones de concordancia se oscurecen rápidamente a premeditarse los acontecimientos.


Me desaprendo de los demás, y adquiero los quiebres emocionales de la pureza. Y siempre hay quienes se deleitan con la maldad y ya no importa el grado de superioridad devengado. Sólo se detecta lo que no se supone, prueba indiciaria de la arbitrariedad.


Pero el asco de los traidores me apena, me desangra y repulsa. Sucede inoportunamente.

Cómo cuando los amantes se juran verdad y se establecen la posibilidad certera del otro.

Andarse con otros y sí, prefieren. Andarse y no temerse a equivocarse.

Especie de dignidad no resarcible con algunas de mis pasiones. Pero diría homicida.

Omnisciente de los encontronazos con los déspotas. Ni siquiera de la mafia ocultista. Que se sepa. Los que andan sueltos y sin tapujos.

Barómetros de la inconsistencia.

Acorde al déficit y sin despliegue.




viernes, 23 de noviembre de 2012

Yaguareté de los Abstractos

Haberse visto, desaprenderse del alma de dios.
Cómo si fuera quisquilloso, al Quantum de los discernimientos.
Haberse visto. Desaprenderse de los bienes y las pocas cosas al Espíritu.

Haberte considerado, y encima con las variedades apodícticas asediando las fronteras climáticas del clímax.


Y tu altivez, que supone ganarme el destino y el sucumbirse a los rastrojos  de la vileza. Tu altivez. Del exteriorizarse sin denominarlo.


Pero la clave de superarme radica en la crudeza, el algoritmo perfecto de la templanza.


Deshacerme de los ecuánimes y relanzarme a los que buscan verdad.
Haberse visto. Rodeado de lo inconfundible. Con una oración hacia el reino. Con los motivos propicios para la desaprensión. Haberse visto.
Y cuando lea tu mente, me iré a naufragar.

lunes, 19 de noviembre de 2012

21 de los Vectores

Sobre las distintas particularidades de la noción de Experiencia se dice mucho y poco para que sobreviva al calvario.

Se dice que para obtener experiencia que desmitifique algunas de las ponderaciones que se realizan en cuanto a la credibilidad de las razones humanas, si se quiere poshumanas, las mismas se verifican como un dato patente y sintomático de la vida relacionista sobre la tierra.

Ustedes dirán, ¿ Observable en todo andamiaje de la construcción política y económica de los rasgos contemporáneos?

¿Que supone entonces el falsacionismo de la experiencia?, No quisiera maltratar la sensibilidad de los nobles, que aún con ansías de superación, credibilizan en factores disruptivos tales como, recursos técnicos y materiales, pero , ¿Ellos son los motivos que quiebran algunos aconteceres mundiales?.

Que hay de los sueños de la Experiencia. De los flujos de la resiliencia
en la vida. Y porque no, el tipo de lenguaje que nos permitiría conmovernos.

No me interesaría al menos que pueda volar por los aires. Al menos que la experiencia, la dicha de la experiencia, permita la calma. La directrices del Sujeto. Y cuando no, al menos que vislumbre necesariedad en los resultados.

Esa seria la experiencia humanística del lenguaje. El no permitido. El no conocido. La comunicabilidad inconclusa de los axiomas del saber. Experiencia del plagio y sus costumbres.

La noción patente de cuando nos alienamos, esa importancia de acostumbrarse a ser uno del resto. Y tantos otros. Que otorgan el susurro a la belleza, de cuando te toque el poder.

La somera idealización de las ideas. Los carburantes permitidos, para que el mundo sea mundo. Suponiendo que las experiencias de nuestros mundos, es algo así, como experiencia del mundo. Arma letal de los encumbrados.



jueves, 15 de noviembre de 2012

"Poètica de la Represalia"

No resarcimos nada. Ni siquiera las ganas de verte. Ni siquiera la intenciòn de desplazarte verdades. Que con las construcciones devengadas, todavìa se agrietan por debajo.

Una làstima. Una banalidad de los males en sintonia de fraguar. Y si te quisiera como una venta de los muertos, no comprenderìas ni los mìnimos màximos espesores del amor. Te Resbalarìas. Suponiendo la disonancia de la Naturaleza.


Pero a Instancia de los dichos, te plantearía lo de los idolatrismos, la mente por sì sola,  no cuenta como un sìntoma. No me mal interpretes.


Son las cualidades de las despesuras, conocimientos que se buscan a sì mismos. Con la quietud de los restantes. Parsimonia de los ignorantes.


¿Y Para què quisiera saber de la Maleza del Universo? Sì nunca irè de visita por esos lados. Al menos que sea orden de la enseñanza. Pero ni te rogarìa Dios. Ni te rogaría.


Vendrìa sí, para contrarrestar alteraciones de los espectros. Y te juzgaría por situaciones, de momento, perimidas de Indolencia.
Pero no es justo. No es justo que sea insoportable verte. Nadarìas de entre los Vientos.

Y que harìamos cuando la maquinaria supra-real baje. Que harìamos.

Si todavìa no nos toleramos en el espesor de esta galaxia. Que harìamos, si las abstractas mentes se naufragan en los vicios de la necesariedad.
Ocultando amores contrarrevolucionarios. Suponiendo que las tormentas son sòlo tormentas.

No desmerecerìa que te recuerde pensando que Abrirìa el Mundo para resolverte, con un puñal en tù mente. "Sabiendas de los comunicados prescindibles".


Y a los antojos de las aguas, niñas que les moldean todos sus sentimientos.


¿Me sirve decírtelo?, ¿Y las mentiras? Que interesa. No lo sabemos.
Aunque tampoco nos incumbe esa parte, sòlo que quisièramos corporizarnos en la existencia interpretativa. El bienestar de los tiempos, suponiendo que escribiste tu lectura, legarte completamente.

Pero esto no hace de mi cuerpo. Tendrìamos orgasmos, pero no es mì cuerpo. Y esto no quita de la verdad del mundo. No lo quita. De la Finitud y de quererte sin resultados.


De los temblores y oscilaciones que nos permiten ser reales. 

Y aunque supusieras de las gramas, esas que te encandilan, que cultivan tus honores, ni siquiera de los antipolìticos, pero que seas.

Porque no soportaría una pesadumbre que me lo invada todo. Abrirías los sonidos para verte. Los abrirías. Y no quisieras.

Sí Supieras de la candidez que genera tu madre en mí. Si supieras.
Resbalarías del Amor. Te Enamorarías de mí. Y al verme muerto, confundiéndote en la historia de las civilizaciones, te adentrarías en las razones de los inconclusos, simulacro de las definiciones. Pero no arguiría. No arguiría los desplazamientos.





miércoles, 14 de noviembre de 2012

Los Amantes Del Descalibre

Comenzamos por compartir las ideas de algunos sistemas. Considerando que sería apropiado, expandirlo por cualquiera de sus mares.

Pero no queríamos matarlo. No querìamos por el simple hecho de contabilizar sobre nuestras espaldas, formatos de aniquilación que entristecen las sombras de las personas. Pero comenzamos compartiendo algunas Ideas. Idea de la superación. Idea de la mejora del mundo.

Y al rastrillaje de confabulaciones se hizo moderno. Altruismo del porque sí. Pero nunca entendimos nada. Nunca supimos del avance con los mares y la territorialidad de los sacrificios. Y acaso porque sí. Pero absorbentemente inapropiado.

No quise decirle nada. Me suponía sincero. Creyendo la verdad del mundo, y esas cosas que calientan mi mente. Pero no quise matarlo. Sólo era llevar una idea, y completarla de cabo a rabo. Pero no. Fugarse.
Escaparse de los caminos vectoriales. Quien sabe. En rigor, los sistemas de ideas ya estàn caducos, absuelven las muertes y justifican los agravios de votarse por sí mismo. Cómo una Individualidad aggiornada de lucro cesante.

Pero comenzamos comiendo los saberes. Impartiendo consignas de la buena voluntad y la serie de tener, entre otras cosas, la responsabilidad efímera de algùn existente. No fue gratificante encontrarte.

Determinar culpabilidades y ajetrear a los otros a que piensen igual, a lo que el buen funcionamiento sistemático de los mundos pide, es un falso poder de ser.

Pero la palabra contra la mía. La palabra desazonando chirlidos. Y el que arguye enamora. Cuestiones que no soporta interés.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Yaguareté

No Supe. No supe que la patraña consistía en olvidarme.
No Supe. Pero ni tampoco, de las conformaciones escatológicas.

Pero bien, las timideces, surcando el ala de los bravíos.
Y aunque actuaste corporativamente, tenes las superaciones.
El grado máximo de inquietudes hacia los Infiernos.

Terrorismo y Mendicidad. Albores de la acumulación con la deidad.
Pero no supe. No supe de olvidar de los amantes. Menos de los lujuriosos.
Con rostros amables, a la espera del amarre del Mal.

Y a los tumultuosos, que engullen de mí timidez, el apriete, la refriega.
Haciendo saber de la arrogancia, con perspectiva de los despreciativos.

Pero que diablos importa de la patraña, si la patraña consiste en olvidarme. Que importa.

Timing. LLenarse de gloria y no adoctrinarme.
Pero que importa de estos mentores.


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Puré de Mandioca

Una droga soberana que lastima el alma de los artificios.
Arrastrándote el molde, de la sinergia hacia el espacio.
Y hay que saber de las monstruosidades terribles y sus sistemas.

Y a pesar de la corazonada, las razones se burbujean con suavidad, casi
diciendo que no sabes del Amor porque sí. Cómo si las justificaciones de consumirte, debieran ser, justificaciones de consumirte. Casi al placer de desarrollarme.

Recordarte entre el populacho, la soledad de brindarte adiós, en la mismísima capacidad de instaurarte.

Decirte del dinero y esas cosas. Aunque sepas que no importa. Aunque sepas que nunca soportarías el bienestar del mal y sus descendencias.

Drogarme. Drogarme porque sí y luego omisiones. Y que sepa Dios.
Y a la altura de las circunstancias, la confianza de obnubilarse con vos.
Puré de Mandioca.





martes, 6 de noviembre de 2012

"Los Imperios"

Y las acusaciones encontradas son de variada índole.
Desde los motivos incausados hasta los que suprimen sentidos por la lógica.

Pero nadie comprende las realidades que concluyen en otros mundos, a pesar de saber, que las injusticias diarias y otras cuestiones varias, no sé significan en los denominados, /periplos pasionarios/.

Abducirse, sedicionarse con las significaciones de alguna red, acostumbraría a decirse, y a veces saberse, que las noches y los días no siempre se relamen en cuestiones de sabidurías tales, porque es la pragmática quien vence a los hombres.

Y a tales dichos, se carece de ningún valor.

Inclusive aún justificando las acusaciones falsas, que suponen que las diferencias engendradas permiten la variabilidad de los mundos, me importa objetivarme en lo que son, seres sin nombre. Acusándose y legitimándose.

Y a maltraer de las sociedades, desde las individuales hasta las que calibran tintes de corte, imperiales, el feedback constituye y desata emociones.

Una noche sin viento podría sucederse a una noche sin viento. Pero ese no es él mal, en el sentido de construcción de realidades que queremos desbaratar. Por el contrario, sin defensa ni ataque, desconoceríamos la potencialidad, a la acechanza de otras verdades.

Y sin embargo, al bloque de simultaneidad, reclamamos las paces. Aunque sea consensuando mentiras.

Permitiendo suponer, que algún día será mejor.
Qué algún día será mejor.