jueves, 29 de agosto de 2013

¿Qué es Esto, De los Vaivenes en la Educación?

Es suficiente con vivir en el mundo y olvidar despreocuparme de todo.

Es suficiente, aunque no sepa de nadie.
Ni de las ideas de amarte a conciencia, subordinándome a una oscuridad flotante, que acaso por la suerte del mérito en esas cosas de la superficialidad de la vida, te atan a mi mente y se refieren. 

Y aunque diga de la consonancia de amarte; en silencio a veces, por algún modo de ser, inaprensible; por la falta de control en su significancia, yerro y vuelo hacia alguna quietud.

Y entonces legítimo. Cuando digo que estuve y no estuve, molestando para que pienses cosas de la injusticia. Cosas del Mundo. De la posteridad sin decir adiós. 

domingo, 25 de agosto de 2013

La Culpa, Del Impostor

La culpa impuesta a ciegas es la del dolor ajeno.
Y acaso Dios con sus deliberaciones, momentos de territorialización, jamás lo idearon así.

Pero es injusto pensar la culpa de manera abstracta. Soportando la mayor cantidad de generalizaciones posibles. Admitiendo el perogrullo y cosas de la infancia. Pero es la costumbre. Realmente es la costumbre. Es la idiotez de aplicar contradicciones y negarse. La culpa por el sistema mixto en cuanto astuto y condicionado.

Y no quiero seguir interiorizándome de tus amores. No quiero ni me sirve darte credibilidad con migajas de una confianza pérdida. Eso sólo logra realzar tus lamentaciones.

Y aunque admita que algunas explicaciones de parte de tu inconsciente, me ceben y me importen; no es, que demostrando culpas ajenas, iniciaremos el amor de la nada y saldaremos al horizonte. No me cuaja. Realmente no me cuaja. 

La mente te soborna con niveles altamente desquiciantes. Cúmulo de hastío. Del deseo. De la posesión. Amarte y temblar.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Las Explicaciones de la Insignificancia

El Derecho es la demostración de la Ley. Y eso me alcanza por lo bajo. Pero de ninguna manera supone la jerarquización de la escritura con tendencia a la orfandad de los Hombres.

Ni que lo piense. Pero es una idea explicativa y netamente de las sincrónicas.

Y bajo esta Posibilidad de Mundo; axioma de la Ley, donde una norma que todos suponen fuera de la aproximación al Derecho: superación del Mundo en cuanto tal, apegado, indefinido e innecesario, presupone su núcleo básico de existencia.


Pivote de la superación del Mundo. Norma-Principio-Realidad. Y la forjan quienes observan la insignificancia de su practicabilidad  y a-historizan la frivolidad de sus principiantes. 

Y aunque nadie sea un dictador de las costumbres para suponer, superar al derecho, alguien lo es, y todo se desmembrana en la ficción del Mundo y su corporalidad.

( Pienso que el mundo existe y no existe a mi gusto. Pienso que el amor es eso. Esa cosa que se desbarranca de sexualidad). 

Pero el Amor existe. Sólo que no lo explico.
Entonces se demora la ignorancia de significarte por el pánico alguno de morir.

(Per se del miedo). Espectralmente me genero miedo. status del mundo y su ontología.


domingo, 18 de agosto de 2013

Una Mente Brillante

Una mente que podría detener el cuerpo, que podría encajetarse de antemano, al tiempo del concepto del mundo y su decantación, me obnubilaría. Me desbordaría. Y eso que una mente brillante no existe.

Pero una mente con la inconducta de los pasos acortados, eficiente por adecuar secuencias no amigables con los déspotas del pre-juicio, no existe. No existe y no miente por ningún Amor.


Se estabiliza y reza, pretendiendo milagros que generen lo pío de la paz. 

Entonces una acuciante definición de la vida, la vida de la introspección, es no creer en la Vida. Pese a la intromisión, pese a los artilugios de favorecer a los modelos de vida de corte retrógrados. Poema de la brillantez del mundo.

Y una mente brillante no existe. No existe y depara lo lógico por cualquier lío de polleras y esas cosas del calentamiento porque sí. 


Aunque al cabo del mundo, una mente sin brillo de la sinceridad, tampoco supondría extrapolarse al infinito.


miércoles, 14 de agosto de 2013

La Ingenuidad de la Ciencia Exacta

Hay algunas cuestiones que no hacen más que profundizar el lagrimeo existencial y afectivo de esa inquietud de mirarte porque sí.

Porque una substancia ( cosa corpórea y abstracta) podría ser aquella substancia que soñabas y nunca legitimar tu propia personalidad, que endeble de las cosas ilegítimas, podría y en mucho modo, desaprenderse de las roscas ciegas e innecesarias de cualquier Idea de Amor.

Y aunque algunos avizoran situaciones problemáticas con tu ser, y otros, que consideran explotar en pasión de cualquier afección del mundo, no podría resultar de otro modo, Yo, aunque no te ame con la exactitud que pretendes, no podría decir semejante cosa.

Una ciencia perfecta acabaría por ser, casi una ciencia perfecta.

Pero no me objetaría en el sentido de: desprecio de la propia individualidad. Sino, por lo exacto y orgulloso de alguna iluminación.

No es ingenuo entonces pensarse de sí mismo, ataviado con las inquietudes de manifestaciones por cualquier Amor que se determina y se va. Pero debería enfrentar al dolor. Dolor de clase  y su elucubración.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Los Robotitos De las Mil Esferas

No consideraría que ofrecerme en estado de óptimas condiciones aparentes, acrecentaría tanto mi ego.

Lo sé, y aunque los vaivenes del micro lenguaje se diluyen en someros agravios, permanentes de un cuerpo inexistente, irreal, no abandono al menos esa idea, del Amor digno.

Que supone dichosos, para quienes manejan su virtud, y humanamente insoportable al que queriendo lo digno del Amor, no logran traslucir la melancolía del Mal. El hecho de lo inabarcable.

Para entonces, desconocer los alcances delimitativos de la refriega, esto es, importancia de valores carentes de neutralidad, sucumbir ante alguna tesón, adentrarse en observar, los graves perjuicios de la mentalidad alienante. 
Y aunque exista la humildad, lo tieso y enajenado por las tantas novedades del Mal encubierto.

No sabía que existirse en uno, perplejamente casi idéntico con los otros, al ofrecerse, estaba prestado del Amor. Aún hospitalario con los hombres, con la codicia. 

Con la simulación del no Amor, con la parte fetiche. El recóndito aliento de naufragarse.