jueves, 31 de julio de 2014

La Croqueta de la hipercomunicación

Cuál destino tenía Dios en su inspiración para soñarse virtualmente sin existencia, y arremeter conductas sin necesidad de arrepentimiento.

Porque sí fuera plausible, su posición de inexistente, a nadie se obligaría a pensar obscenidades con tal de sentir la vara de una culpa.


Y es que entonces habría civilizaciones domadas por situaciones de histeria y vacuas leyes, que sólo morigeran la falta de conexión y el arduo despliegue de la armas, frente a los sincericidios del momento sin ubicuidad de la significancia. 


Debería Dios un tumulto. Debería la sensación de amar, y el fuste para el martirio.

martes, 29 de julio de 2014

Secuencia y especificidad

Esta secuencia no la borro más. Todo un hombre íntegro despojado de su mayor intimidad. Cuando las sirenas promisorias lo catapultaban al frenesí de su dejadez histórica. Aunque la plusvalía del mundo, le molestaba en el alma y cuerpo de su resurreción. Arbitrio del capullo que comía informes para la felicidad.

Y es sucedáneo de los amantes, especificar la angustia de su corporalidad.

Es que usualmente millones que condicen del huequismo, perpetran la 
materialidad de la genética dopada. Brillantina que bracea la imagen de la real oscuridad. No naif oscuridad. Serotonina y albacea para el sincronamiento.

domingo, 27 de julio de 2014

De la promoción, y la acechanza con la matemática

Abreviaba a modo de real reivindicación, la minoría de significantes posibles. Pero estaba en otra. En la intelectualidad de los niños pobres y la sombra de los números sin mente. 

Acaso no sabías que soy escurridizo y no me agrada la generación que le va la empatía con creencias de la corrupción y otros tantos bemoles. 

Pero es demostrativa la ciencia que no tiene corazón y alma para amar. Te sugiere y empieza a temblar. Aunque nunca la moral fue tan narcisista como la sapiencia del mal. Perimir en el nudo gordiano y baja reputación.

viernes, 25 de julio de 2014

De la Solitariedad Intempestiva

Y otras tantas veces lagrimeaba el temor de mis padres. Cuando navegaban juntos y exclamaban la intervención de sus hijos. Y a consideración de una comprensión reflexiva, no había justicia material que los abarque y congraciara de verosimilitud. 

Era una obviedad. Donde relacionarse con ideas religiosas que se interpretan según las conveniencias del tiempo y la posteridad de los ermitaños creíbles, se estableciera como lo normal.


Y ningún otro sufrió el amor de la solitariedad cómo yo lo hice.

Una solitariedad que habla del pesimismo y la baja hipocresía del infortunio.

Pero habrá infinitud de celos. Infinitud e innecesarios celos. Otrora, leguas y leguas, y un amor inconcluso.

miércoles, 23 de julio de 2014

Espectro y sugestión para el amor

Nada en contra pero no eres auténtico. Y a falta del afecto sincero prefiero lidiar con los espectros de maldades terrenales y ocasionales.

Es un usufructo que tengo con el alma desacreditada y común del resto.


Aunque todos los días adhiero a la supervisión de las hecatombes existenciales, donde sonrío y le encargo a Dios, amor y legitimidad con los amantes.


Porque el día que caiga el relámpago me iré a buscarlo. Naufragaré, pero me iré a buscarlo. Función y desaire de la sinceridad.

lunes, 21 de julio de 2014

El lapsus psi, y la confabulación de los extorsionadores

Confabular. Entrometerse con el raciocinio de los superdotados. Aclimatarse donde no esta el pie. Y otras tantas veces que te intuiste y enamoraste en el perjuicio de los invasores. 

Pero no respondo a las intimidaciones de jueces, que creen guerrear en inhóspitas zonas y entregan la carne de sus contemporáneos. Es el elemento de la vitamina el que te puede generar cambios bruscos y la caída de la emotividad en el mapa.

 Aclaro, nadie es responsable en la huella de inquisiciones permitidas y durables de los chantajistas. Adrede, el cosmopolita finge y se va al espacio. Adrede, la densidad del mundo va en partes de la ideología.
Terror. Humor y expansión.

domingo, 20 de julio de 2014

La Pretensión, y el aura para el detective

No sabía que se te imponían los celos por aquellos que te gobiernan. Por aquellos incluso, que ejercen la inteligencia con el mandato desapercibido.

Y te veía feliz con los hombres que lamían tu cuerpo, a expensas del desgaste emocional e introductorio del mundo. Pero era ingenuo la idea de una aldea autosatisfactoria. Ingenuo y terriblemente autoritario con la razones de la benevolencia. 


Es juzgar entonces, situaciones tan disímiles como contrarias al bien de la oportunidad. Pero había aura para desactivar la blasfemia. Androide y quid de la superación.

jueves, 17 de julio de 2014

Affaire y táctica

Entonces sólo quería legitimarte. Darte un dardo por la espalda pero legitimarte. Sabiendo que era el comienzo. El comienzo del desatino por un corazón quebrado de lujuría y permisividad. Y eso que amaba la bondad de la ética sin sacrificio. Intromisión, y alguna barricada para evitar el deseo temperamental del sosiego. 

Y te amaba a escondidas. A escondidas del amor soberano e incondicional. Pero entonces, amarte de esta manera implicaba otras significaciones que nada cuentan a título de elucidaciones que evitan el suspenso por doquier. Malignamente morí en el desencuentro. Desnudando palabras y guerras sin goce.

sábado, 12 de julio de 2014

Clon

Tenía otras instancias pero no quería reclamarte. Aparentemente por una consideración de rebeldía. Y no estaba entonces, en situación de darte felicidad, sólo por conveniencia de las partes.

 Eso implica que rara vez fui falso. Y la sinceridad no es química para los pobres sin bienaventuranza.

 Por eso partí de sincronizar el mundo y las cosas que vos querías. Vestigio de vidas abstractas y mágica lumpenización. Entonces fui muerto como lo imponía la sociedad.

Ocultado y querible. Acaso las cosas simbólicas no fueron mías. Ni de Dios, ni del mundo. Pero es oportuno y no triste, decirte que alguien te halla amado de verdad. 

Y que tú corazón pueda latir con la latitud sagrada. Y que esmere el amor encriptado. Ego y clon de la deconstrucción. Dureza de la disciplina. Individualismo y pasión.

jueves, 10 de julio de 2014

Leit motiv y el impedimento social

Yo pensaba sin chistar que de esa cuestión de la información, quedaría en los anaqueles de la impronta vernácula con el malevaje de los dictados sociales. Incluso más, que a falta de la lógica, no tendría sentido la exageración perfecta o loa del mundo. 

Pero nunca falto la codicia por el manejo de la historia y la crianza 
individualista en el resto de los jóvenes. Y por tanto, se suponía el grave letargo de inmadurez. Por suicidarse en ideas altruistas o ideas superlativas del bien, que nunca aquejaron al sistema ficticio del dinero y al fantasma del impedimento social. Por ende, escondía energía para amarme en el prójimo.

Y por eso, morir por una consideración espontánea se parece más, a una instancia preliminar, de morir-se sin dignidad en la vida, que al fondo común de las partes. Y estaba sin razón cuando elucubraba sobre la fiebre del amor raudo y feliz.

Acaso Dios me inventaba en mente que nunca me portara mal con las enseñanzas de la buena voluntad y esa idea de la bonanza con el temple frente al remordimiento. 

Pero espere mal. Estudié las arduas implicancias del amor desaliñado. Anzuelo, y detuve el tiempo a favor de generaciones que no distinguen el vórtice de encadenamientos diferencial entre Bien y Mal.

Acaso por error u ignorancia se filtran datos que no corresponden con su función. 

Y entonces vilipendian la denuncia por encubrir el efecto mordaza. 

O a veces, el desacato por tener amor de apariencia con Dios y olvidarse de la molécula que los hizo vivir, y la cruenta historia de las batallas cuando se entrometían con las jerarquías alquimistas y seriales. Por entonces, la savia de la fiebre de la ebullición en carne propia.

No tener miedo es a veces, inspirarse en el mal. La conducta proclive al falso discernimiento. Encubrir, mentir. Acaso la totalidad. Prejuicio de los encumbrados.

viernes, 4 de julio de 2014

Karma, experiencia y contradicción

Borraron el tema porque no les gustaba. Era obvio, ante tanta crítica que objetaba mi destino, era preferible callar. 
Pero no. Humillaron la sapiencia de los cavernícolas y se entregaron al farrandeo. 

Y esa es la historia de las verdades. Construidas aunque no se sepa de las coyunturas adversas y de la premonición de los sueños. 


Pero ante la burla de la consideración, yo tenía las luces oscuras sobre mi cuerpo. Sobre la intención, sobre los ríos alborotados y los cauces de los desinteresados por la ética. 


Y acaso nunca tenga tu amor, tu cordura. Porque desprecias la creencia en el goce y nada más. Ese es el mundo. Una consideración no fidedigna y alguna otra herida.

miércoles, 2 de julio de 2014

Del Carácter fuerte y otras indicaciones

Livianamente se hablaba de ciertas personalidades del mundo. Incluso existe la tendencia a elucubrar las significaciones sin permiso de las contextualidades. 

Pero no había vacío existencial a la hora de sobrellevar la vida y estas implicancias de las elucidaciones. Había bravura y amor por el prójimo.Textos adversos que perforan la psiquis de la gran aventura.


Y aún existe, porque no, bravura de modificaciones (cláusula pétrea) para nuestra inteligencia emocional. Que no implica alteridad de cambio y decir; fuimos bárbaros por el propio convencimiento de nuestro tiempo. Aunque a priori, fuimos restableciendo conductas cognitivas acorde a etapas de planteos y razonamientos más proclives a el innatismo de la particularidad.


Y es por eso, que por debajo de la tecnología y la química, nos confundimos de cuerpo y exclamamos verdades y confesiones que no están al interés de la inteligencia. Acaso alguien diría del carácter violento dirigido a las fauces de los ángeles e inocentes de la mala comprensión y altiva elucubración. 


Porque elucubrar incorrectamente no sólo daña el funcionamiento de idea de Bien y sus fervorosas ramificaciones. 


Quiebra la garantía de potencial felicidad de los desdichados. Y sino fuera así, el carácter emocional del mundo, se agotaría intrínsecamente al aval del primer perjuicio ocasionado. Y entonces, esto no es mundo. Indicación de concepto. Pero no mundo.