Ya se sabe que no quieren a nadie. Distintas vicisitudes hicieron de sus padres, desconfiar hasta de Dios mismo. Y ni se te ocurra preguntar porque decidieron recrear distintos tratamientos invasivos cuando su hijo primogénito desfallecía en sangre. Se supone, desconocimiento total de las causas que lo producían.
Pero se hacía difícil interpretar sobre el vado de la ignorancia y repartir culpas cuando se sucedían dichas cosas. Y entonces se sabe que no querían a nadie. Y para resolver aporias a-programáticas se llamaban a celo y discutían en base del perfil individualista.
Se hipnotizaron. Murieron de amor y negaron el control del elemento punzante.
(Química).
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